Algo conocido tras cinco temporadas de Juego de Tronos es el punto de inflexión que suelen suponer en el desarrollo de la serie los novenos episodios. Ejecuciones, bodas sangrientas… Todos nos dieron algún tipo de sorpresa. Un año más, David Benioff y D. B. Weiss nos sorprenden desde el inicio de Battle of the Bastards, trayendo grandes cambios para los personajes de esta saga.
Y desde nsf, continuamos con nuestra cita semanal con Poniente. Si aun no sabes de lo que hablo, haz click aquí para leer el resto de análisis de la temporada. Si estás al día, sigue bajando. A partir de aquí, cuidado, la noche es oscura y está llena de…
Lo peor
Bueno, habréis notado que esto de buscar lo peor en un capítulo así es difícil, ¿verdad? Pues es así, ha sido imposible encontrar algo que podamos calificar como «lo peor» en Battle of the Bastards. Por lo tanto, esta semana, nadie se lleva un micrófono, así que en homenaje a Ramsay Bolton, vamos a ver como menea la salchicha.
Lo menos peor
Con un inicio por todo lo alto en Meereen (del que hablaremos más adelante), la trama pronto se ha desviado hacia Invernalia, donde la esperada Batalla de los Bastardos ha cumplido las expectativas. Pero entre tanta escena épica, una duda me surge: ¿por qué Sansa? ¿Por qué no eres capaz de decirle a Jon que espere a las tropas del Valle? Aunque, viéndolo desde otro lado, si ese hubiera sido el caso nunca hubiéramos visto una batalla tan cruda como la que nos han mostrado. Así que, sí, Sansa eres lo menos peor, pero gracias.
Bueno
Tyrion, durante toda esta temporada, ha quedado reducido a pequeños discursos junto a las personas de confianza de Daenerys, a veces incluso sin peso argumental en la historia. Y en Battle of the Bastards no es diferente.
Pero no quiero darle a nuestro enano favorito 1 o 2 micrófonos de nuevo. Y si bien, una vez más, tiene un peso pequeño en la trama, nos demuestra su facilidad de palabra en las grandes ocasiones, siendo la voz de la Khalessi mientras ésta destroza el ejército enemigo a lomos de un dragón. ¿He dicho dragón? Pasemos a la sorpresa de este noveno capítulo…
Muy bueno
Todos esperábamos un capítulo centrado en la batalla por el Norte, pero tras los créditos iniciales nos hemos encontrado en Meereen, en mitad del ataque de los Amos. La vuelta de Daenerys sin más explicación durante la semana pasada solo podía sugerir una cosa: dragones. Y vaya sí ha habido dragones.
Con Drogon más grande que nunca, Daenerys plantea las condiciones de su rendición a los traficantes de esclavos. Una magnífica escena que demuestra el verdadero poder destructor que tienen estas bestias, inundando la Bahía de los Esclavos de fuego.
Pero, tras la aplastante victoria del ejército de la khalessi, entran en escena Theon y Asha Greyjoy. Ya han llegado a Meereen y traen 100 barcos con ellos. Parece que el desembarco de Daenerys en Poniente no va a tardar en llegar. Veremos donde nos lleva esa alianza Daenerys-Asha.
Lo mejor
En un capítulo centrado en la batalla de los bastardos, es normal que lo mejor sea la batalla de los bastardos. Vamos, el 75% del episodio. Jon, queriendo provocar a Ramsay y hacerle cometer un error, termina siendo guiado por el bastardo Bolton a una trampa. Tras el asesinato de Rickon, Jon pierde el control y decide cargar contra el ejercito enemigo, mayor en número.
Una vez en mitad de la batalla, todo sucede acorde al plan de Ramsay, lo que deja a las huestes de Jon en una mala posición, atrapados entre un muro de cadáveres y las lanzas de sus enemigos. Pero, evocando uno de los mejores momentos de El Señor de los Anillos: El Retorno del Rey (2003), los caballeros del Valle llegan al rescate de las tropas de Jon, salvándoles de una muerte segura.
Juego de Tronos nos ha ofrecido, posiblemente, una de las mejores escenas de batalla que hemos podido ver en la televisión, mostrando dos extremos opuestos: Ramsay y Jon. El villano que no participa en la batalla y el héroe que lucha junto a sus hombres. Y sí, es Juego de Tronos, pero es Jon Nieve.
Pero si antes comparaba esta batalla con ESDLA, ahora volveré atrás. Por mucha épica que pueda arrastrar esta batalla, no tenemos grandes momentos de violencia individual (al estilo Legolas). En cambio, podemos disfrutar la realidad del fragor de la batalla desde nuestro salón y sufrir con la evolución de ésta. Porque todos hemos temido por la vida de Jon Nieve una vez más, eh.
Y como voy a acabar esto sin mencionar a Iwan Rheon, el actor que pone cara a Ramsay Bolton. Magnífico villano, y genial interpretación, consiguiendo que todos odiemos a Ramsay Bolton. Un gran final para este personaje.
nsf points
«Estamos ante el que sin duda es el mejor capítulo de toda la serie. Una batalla épica y muy bien realizada por los productores de la serie, donde vemos el final del tan odiado (y fantástico) Ramsay Bolton. Capítulo donde todo es muy predecible pero que de igual forma te mantiene con la boca abierta en todo momento.»
Álvaro Corujo (crítico de No stage fright)
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