Lady Bird - No stage fright

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A tan solo unos pocos días de los Oscars, que este año celebran su 90º edición, algunas de las grandes nominadas llegan a los cines en España. Ha sido el caso de La forma del agua, que se estrenaba el fin de semana pasado, y de Lady Bird que ha llegado a nuestros cines el viernes 23 de Febrero.

Lady Bird nos cuenta la historia de Christine McPherson, una joven de 17 años que se muda con su familia a Sacramento (California) donde vive su último año de instituto. Se trata de un relato con tintes autobiográficos y el debut como directora y guionista de Greta Gerwig (Greenberg, Frances Ha). Y hasta aquí necesitáis saber.

Lo especial de Lady Bird radica en la simplicidad de lo que cuenta, sin grandes proezas por parte de su protagonista ni espectaculares giros de guión. Es una historia que se encuentra llena de pequeños espacios comunes. Las ciudades pequeñas y provincianas que pueden ser tan acogedoras como asfixiantes. Los últimos años de instituto, que siempre se representan como memorables y que pueden ser más bien aburridos. Los padres introvertidos e increíblemente generosos con sus hijos. Las madres tan implacables como preocupadas que no controlan el nivel de intromisión que deberían permitirse. Los mitos en torno al amor y al sexo que se desploman con la pérdida de la inocencia. Y otras muchas más decepciones cotidianas.

Junto con la dirección, lo más destacable de esta película son las interpretaciones de su protagonista Christine (Saoirse Ronan) y de su madre Marion (Laurie Metcalf), ambas nominadas a los Oscars. Su relación es el hilo principal de la película y consiguen la naturalidad y la complejidad que caracterizan la mayor parte de relaciones madre e hija a esas edades. Aunque el papel de Christine le ha valido a Saoirse Ronan el Globo de Oro a Mejor Actriz de Comedia, lo va a tener complicado compitiendo contra Francis McDermond por Tres Anuncios a las Afueras. Tampoco lo tendrá fácil la directora, Greta Gerwig, que compite contra Guillermo del Toro por La forma del agua. Aunque ya puede apuntarse el tanto de ser la quinta mujer de la historia de los Oscars en ser nominada por Mejor Dirección.

En cualquier caso, y gane quien gane, Lady Bird merece al menos un visionado, aunque me voy a permitir una concesión. Si no la veis en el cine, no es un problema. Es perfectamente disfrutable una tranquila tarde de domingo y puede que hasta tenga un encanto especial verla en casa.

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